Cuando leo “De cómo hacer Planificación Situacional aprendiendo”.

Por: Arlette Pichardo Muñiz

“De cómo hacer Planificación Situacional aprendiendo” es el título de mi última publicación, bajo el sello de la Editorial Brujas, en Córdoba, Argentina.

Mi colega Adán Carranza, compañero de estudios y amigo entrañable, ha sido muy generoso en su invitación a la lectura:

Tomé el libro con los ojos de turista que se encuentra con una mata de dormilona. Leído en su generalidad y totalidad, posee coherencia vertical y horizontal. Es sólido en su fundamentación. Introduce a la planificación situacional no sólo desde la razón, sino desde la acción y la emoción. Un plus extra es el componente de experiencia y síntesis de la autora. Ella está ahí en el texto, como en su primer libro, un clásico, “una obra considerada valiosa que perdura a través del tiempo, casi un modelo en su género, es un libro que permanece en el gusto del público durante años”. Eso es su libro. ¡Y viene este otro!.

Cómo escribo en las palabras iniciales: “Un libro que aspira a ser innovador, en su esencia y en su estética. Con el sabor del primer libro que escribí recién empezando mi vida profesional, mientras esperaba la llegada de mi hijo Jorge Luis, y ahora con la tecnología digital al servicio de la (re)sonancia. En aquel momento, una novedad. Muchos otros libros he escrito desde entonces. No obstante, sigo sin superar mi propia marca; ese libro es el más difundido, el más leído, el más citado y el más aplicado”.

En esta oportunidad, con la mediación pedagógica de Adán Carranza. El acompañamiento de la canción-tema “Buen día”, letra y música del compositor, arreglista, cantante y productor Adrián Goizueta, nacido en Buenos Aires y maestro de varias generaciones en Costa Rica. El dibujo de la portada e ilustraciones interiores de Edgardo Mora Morales. El consejo en los usos de la metáfora de la travesía de Germán Quirós. El diálogo enriquecedor con Alfredo Mora y los aportes de las aplicaciones en conversaciones con Alfredo Calderón Gómez; Martín Hormes y Javier Bráncoli, éstos últimos de la Universidad Buenos Aires (UBA) y otras universidades argentinas.

Y, sobre todo y ante todo, la huella omnipresente de mi maestro Carlos Matus Romo (1931–1998), el genio de la fantasía creadora en materia de Planificación Estratégica Situacional (PES), como el mismo denominara a su enfoque endógeno de esta Amerindia nuestra.

Planificación Situacional. Un nombre con resonancia, atractivo y sugerente. Su utilización trasciende un apelativo para hacer diferente un nombre. Situacional, un sustantivo propio, no un adjetivo calificativo. Un concepto común, de fácil entendimiento; sencillo en su comprensión. Su aplicación primigenia en los ámbitos de la planificación y su correspondiente definición corresponde a Matus, uno de los principales méritos de su obra. En tanto categoría epistémica, nos conduce a los actores y sus acciones; que, con sus acciones construyen la situación.

De manera intencional, tomé la decisión de prescindir en el título de la palabra estrategia adosada a planificación. No obstante, en el texto continúo recurriendo y recorriendo a ese concepto, tratando de darle contenido de manera diferente. Al igual que diagnóstico, pronóstico e imagen-objetivo que en conjunto con trayectoria le imprimen sentido de manera integral al mapa situacional, con el que venimos trabajando desde hace años.

Lo nuevo

De la Planificación Situacional

Soltamos amarras para zarpar o levar anclas. Con un recuento por los antecedentes (la experimentación numérica en Varsavsky y Calcagno) y un repaso del andamiaje metodológico (de Planificación de Situaciones a la Teoría del Juego Social, los aportes de Carlos Matus), base para compartir principios aplicados del cuestionamiento de la visión convencional de la ciencia (de la incompletud o incompletitud, de la incertidumbre y de la complementariedad) y cuidados necesarios (¿quiénes planificamos?: acceso a poder e intencionalidad, ¿cómo planificamos?; aproximaciones sucesivas; y ¿para qué planificamos?: direccionalidad y viabilidad), que le imprimen sentido esencial y significación sustantiva al constructo que da origen al título del libro.

Carlos Matus. Toda explicación situacional es incompleta, porque es incapaz de apreciar todos los puntos de vista. La planificación situacional es como una guerra de trincheras contra la incertidumbre futura que generan los sistemas complejos. La idea de estar en una situación, de ser y hacer en una situación, junto con conocer y explicar desde dentro o desde una situación.

Del método

Preparándonos para arribar. Pasamos revista, a partir de una variedad de experiencias de aprendizaje, aun conjunto de visiones acerca del contenido y los propósitos de la planificación que pululan en el imaginario social, tanto en el sector público, como en ámbitos empresariales y organizaciones en general. Planificar, como una especie de “camisa de fuerza”. Planificar similar a una carta de intención. De las escuelas de planificación al modelo PipoE, una sencilla rueda de timón o de comando direccional de una embarcación: Promoción, indagación, programación, organización y Evaluación, una creación y aplicación por más de 25 (veinticinco) años, desde diferentes espacios de actuación. Una promesa compartida. La vigilancia o vigía es la clave del método. Una guía para acercarnos a los principios y cuidados esenciales de la planificación situacional.

El método (el tao, 道, el camino) no hace a la planificación situacional. ¡Pero como le ayuda!

Lo renovado.

Del diagnóstico situacional

Navegamos las primeras millas. Una ojeada por los significados y usos de la palabra diagnóstico (en medicina y otras disciplinas de estudio), los prerrequisitos (precisión y oportunidad), la particularidad del diagnóstico situacional (característica distintiva y diferenciadora enraízarse en los usos de la categoría situación), las claves epistemológicas (la periodización, la identificación de múltiples condicionantes y la delimitación de lo que es relevante para la acción de los actores) y la estrategia de indagación (primer momento: conceptualizar; segundo momento: configurar el espacio para actuar; y tercer momento: delimitar la situación).

Edgar Morin. El conocimiento es navegar en un océano de incertidumbres a través de archipiélados de certezas.

Del pronóstico

Continuamos remando con una parada intermedia. Del significado y usos de la palabra pronóstico (aplicaciones prácticas en la física y la medicina), de las prioridades de atención (lo que se atiende primero) y los criterios para establecerlas (grado de urgencia y capacidad de respuesta).

Alan Mathison Turing. Sólo podemos ver poco del futuro, pero lo suficiente para darnos cuenta de que hay mucho que hacer.

De la imagen-objetivo

Seguimos con el recorrido. Del significado y sus elementos (activos y condicionantes), características (realismo, claridad y precisión) y requisitos (representatividad, validez, singularidad, significación direccional y capacidad semiótica). De los aportes de la prospectiva (Pierre Massé y Michel Godet). De las aplicaciones (Varsavsky y Carlos Domingo). De la utopía concreta (Ernst Bloch). De principios básicos del holismo y la complejidad (la flecha del tiempo, el atractor extraño y el efecto mariposa).

Mario Benedetti. Ahí está el puente para cruzarlo o para no cruzarlo… en la otra orilla alguien espera...

De la estrategia

Y más recorrido. Del significado de la palabra estrategia en el lenguaje de la guerra, pasando a su adopción en el mundo de los negocios y sus usos en el lenguaje común asociados con múltiples y diversas connotaciones, propósitos y significados. La vinculación estrategia-táctica y su operativización en la delimitación de objetivos (alcances) y metas (hitos en el camino). Como dice Morin, “se tendrían que enseñar principios de estrategia que permitan afrontar los riesgos, lo inesperado, lo incierto y modificar su desarrollo en virtud de la información, adquirida en el camino”.

George Sawyer. Una estrategia es un mapa hacia los objetivos.

De la trayectoria

Una compuerta a la vista. Del significado y los diferentes tipos en la secuencia de operaciones (trayectoria técnica, trayectoria política y trayectoria final), de la prueba de suficiencia (eficacia direccional y eficacia procesal), de la viabilidad en construcción (requisitos de viabilidad y viabilidad resultante) y de los cursos de acción (avance, consolidación, retroceso y saldo adelante).

Robert Luois Stevenson. Lo importante no es llegar, sino ir.

Lo obviado.

El recuento histórico. Relato hoy en día conocido y discusión prácticamente superada.

Las guías de presentación de programas y proyectos. Ahora disponibles en Internet en gran variedad y diversidad atendiendo a criterios y formatos institucionales.

Disfrutemos, pues, los recorridos.

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Próximamente para lectura on line y a la venta en Amazon y librerías nacionales.